Como todos los años, llega el caluroso verano valenciano y con él termina el curso, aunque esta vez no parece que necesitemos tanto el descanso y el cambio de aires, como la rutina, nuestras reuniones semanales y las agujas que tanto nos relajan y nos ayudan a sentir que seguimos adelante, que estamos activas y que creamos cosas bonitas.
Durante el confinamiento seguimos todas en contacto, bordando, cosiendo, tejiendo,… He guiado muchos proyectos en la distancia, desde bordados hasta colchas de ganchillo, jerséis de punto o proyectos de costura, como unos pantalones que todavía me tienen sorprendida. Todo esto me hizo sentir muy acompañada, que era lo que más necesitaba, porque aunque por fortuna estaba con mi familia, echaba mucho de menos a mis alumnas.
Así que ¡gracias, chicas y feliz verano! Coged fuerzas, nos vemos en septiembre ♥ ♥ ♥